Hay en ella una energía sensual que envuelve, una presencia que provoca y despierta deseos con solo estar cerca. Su cercanía es intensa, su voz suave y juguetona acaricia los sentidos, y cada instante a su lado se siente ardiente y apasionado. Con Angie, cada momento se convierte en un baile de química y tentación, dejando una huella que no se olvida y un fuego imposible de apagar.